California: Las personas siempre dicen te extraño.

Las personas dicen "Te extraño" yo no les creo demasiado, cuando les creo siempre me decepciono, cada quien al final tiene su vida, y lo único que extrañan es hablar cara a cara, sin embargo yo sí los extraño, sin ser arrogante,  extraño los abrazos, las conversaciones cara a cara,  las citas cada semana, extraño ver gente caminar por las calles, usar botas. pero ¿extrañaré California? ha sido un viaje muy ácido, casi que no sé si aguantaré hasta el final, a veces siento que me obligo a vivir experiencias que me hacen sentir mal, como vivir por dos meses más a
He estado muy nerviosa, preguntándome si podré aguantar tres semanas más aquí, afortunadamente esta semana los niños se fueron a México, así que la casa estará más tranquila, limpia, acogedora y tendré un cuarto para mí sola. Ya no lo necesitaba.
Varias veces esta semana he tenido ganas de gritar,  no sé por qué no lo hago, quizá para no parecer una loca, pero parezco más loca con mi intolerancia hacía las personas. me siento enojada conmigo, me duele el estómago, me quema, el corazón e da vueltas, la cabeza me duele, hace unos días un ventilador me arrancó una uña del pie, llevo cuatro golpes en la cabeza y mi intestino no está funcionando muy bien. Creo que como siempre mi umbral del dolor y mi tolerancia, han hechos de la suyas, por eso me pregunto si podré aguantar a fin de mes.
¿Saldrá algo bueno de esto? solo sé que he leído más que de costumbre, he visto más películas y tomado algunas fotos interesantes, es como si tuviera un tapón en mi creatividad pero aquí no pudiera destaparlo.
Pido disculpas si esta carta no tiene sentido pero mis pensamientos se disipan rápidamente, me he sentido contenida todos estos días, lo único que quería es que los niños se fueran.
No he encontrado a nadie con la confianza para hablar con él o ella de mis verdaderos sentimientos. e ha costado mucho relacionarme, eso me tiene estresada. Además de no tener un espacio donde poder crear (necesito uno). 
esta semana lo que más me impresionó fue limpiar la casa de una chica drogadicta. me dolió mucho ver de cerca la decadencia de una niña de 20 años. La conocí por que K.  es hija de S. una señora a la cual V. le limpia su casa. se conocen desde hace doce años.  Ahora K. vive sola, terminó con su chico hace unos meses y decidió cambiar de casa, V. y yo la ayudamos a mudarse en medio de un día de verano. Esta semana llamó para que le ayudáramos a limpiar su casa (ordenarla de principio a fin). cuando llegamos K. salió a la puerta, su cara maltratada, fue la primera señal para llevar mi pensamiento a un prejuicio sobre la drogra. pero fueron las fichas de 30 días en su joyero y las jeringas en su cajón lo que me hizo pensar que el desastre que gobernaba su casa era solo la punta del iceberg. Al llegar a su cuarto, que era la última habitación que faltaba, mis ojos se toparon con un estuche para lentes que sujetado alrededor con una liga dejaba ver el interior con los instrumentos perfectos para inyectarse heroína, creo que al final mi tesis, que al principio pensé que era un prejuicio, me daba la razón, estaba en casa de una drogadicta, 

Pero sabes, sea quien sea que esté leyendo esto, sentí una pena muy grande, mi cabeza empezó a dar vueltas y tenía unas ganas inmensas de echarme a llorar, ¿en qué momento nos perdemos? ¿qué nos pasó para que llegáramos a tal punto? y hablo en plural porque todos somos adictos de algo. Al sexo, la tristeza, la violencia, las drogas, el alcohol, o a relaciones toxicas. Estos días he lidiado con la ansiedad. Digamos que ese es mi "malviaje". Las emociones están a flor de piel, me identifiqué tanto con ella que también me enojé, ¿en dónde están sus papás? ¿en donde su familia y sus verdaderos amigos? ¿tenemos verdaderos amigos?  de esos dicen que te extrañan cuando estás a Kilómetros de distancia y les dedicas pensamientos y les compras recuerdos. Realmente, no lo sé, yo solo creo que si algo nos puede salvar es ese algo que es más grande que nosotros y nos dice que nosotros mismos somos nuestros únicos amigos, es esa fuerza que nos saca adelante aunque caigamos al fondo. 

Nadie puede salvarnos, solo nosotros, Dios y nosotros. Los alquimistas, los magos y algunos otros, no solo creen en el poder del hombre, creen en un Dios que nos acompaña y nos fortalece. Yo también creo en él. i Dios no es moralista, mi dios me ayuda a cuidarme, a ser fuerte cuando soy debil. 

Espero que K. encuentre a su Dios interior, que sea más fuerte que las ganas de morir o escapar, ya no quiero escapar de mis pensamientos.

Ya no me preocupa si las personas me extrañan o no. Solo si yo extraño o no a mi Dios, porque él siempre está aquí.

Dios cuida a K. A ella y a todos los que sufren, la vida no debería costar una vida.

Amén.


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